Identifica Rastros y Huellas de Animales en la Naturaleza
Descubre cómo identificar rastros y huellas para conocer mejor las especies que habitan en tu entorno natural
Huella de zorro
Aprender a identificar rastros y huellas de animales te conecta de manera única con el entorno natural. A través de la observación cuidadosa, puedes descubrir qué especies habitan o han pasado por un área, sus hábitos y su comportamiento. Con esta guía práctica, podrás convertirte en un explorador, descifrando los secretos que los animales dejan en su camino.
Huellas
En tus salidas al campo puedes encontrar 4 tipos de huellas según su estructura:
- Plantígrados: estos animales apoyan toda la planta del pie al desplazarse, como los osos, los tejones o los humanos.
- Semiplantígrados: Marcan una planta incompleta formada por almohadillas flexibles. Por ejemplo, mustélidos como la garduña o la marta.
- Digitígrado: estos animales apoyan sólo los dedos o los dedos y las uñas, mientras que la articulación del talón queda en aire. Por ejemplo, los felinos, como el gato montés, el lince o el puma; y los canidos como el perro, el lobo y el zorro.
- Ungulígrado: Sólo apoyan las uñas. En estos animales sus pies se han modificado hasta convertir sus uñas en pezuñas. Por ejemplo, el jabalí o el ciervo.
Huellas de lobo, zorro y perro
Las huellas del lobo son algo más grandes que las de un perro, más estilizadas, con las almohadillas más alargadas. Las uñas se marcan mucho mejor. Las huellas traseras son visiblemente más pequeñas que las delanteras. Las huellas del zorro son más pequeñas que las del lobo y las del perro. Su aspecto es más estrecho y más alargado que las de aquellos.
Huellas de zorro, perro y lobo
Huellas de vaca, oveja y ciervo
Al igual que los grandes mamíferos con pezuñas, las vacas dejan huella de dos dedos. Es sencillo diferenciarlas de las de un ciervo, tanto por el tamaño como por la forma, siendo la huella de ciervo más similar a una gota de agua. Cabe destacar que las huellas de oveja, son muy similares a las del muflón. Sin duda, nos ayudarán los tipos de pisada característicos de las ovejas, marcado en su parte delantera como si andaran de puntillas. La forma general de las huellas del ciervo tiene forma de ovoide, con los laterales arqueados. La diferencia con las huellas del gamo, son bastante evidentes: la huella de gamo presenta una forma triangular muy marcada y pisada más homogénea que el ciervo, que tan solo apoya un tercio de la pezuña.
Huellas de zorro, perro y lobo
Huellas de gato, gato montés y lince
Los felinos no marcan las uñas en sus huellas. Podrían confundirse las de lince con las de gineta, al tener ambas un tamaño semejante, pero sólo hay que contar las almohadillas para salir de dudas, pues mientras el lince tiene cuatro, la gineta muestra cinco, como se puede ver más abajo. La diferenciación en el monte entre las huellas de un lince y un gato montés, no reviste dificultad, dada la diferencia de tamaño.
Huellas de lince, gato montés y gato doméstico
Huellas de jabalí y de tejón
Las huellas de jabalí son fáciles de distinguir, pues, detrás de las pezuñas principales, suelen dejar las marcas de las pezuñas secundarias, como dos puntas de flecha. Otra característica importante es que durante la marcha acostumbra a apoyar la pezuña trasera donde apoyo la delantera. Las huellas de tejón son sencillas de identificar, cosa que no sucede con otros mustélidos Tienen forma de zarpa, con cinco almohadillas terminadas en unas muy afiladas marcas de uñas.
Huellas de jabalí y tejón
Huellas de nutria, de conejo y de gineta
Las huellas de nutria son sencillas de identificar, si están bien marcadas permiten ver la membrana interdigital y las puntas de las uñas. Las huellas anteriores son casi circulares, las posteriores algo más alargadas. Las patas delanteras de los conejos tienen cinco dedos, aunque sólo marcan el pulgar en terrenos muy blandos, como nieve. Las patas posteriores, cuatro dedos. Las huellas de gineta no marcan las uñas, al igual que los felinos, pero marca un dedo más que nos ayuda a diferenciarla de aquellos.
Huellas de nutria, conejo y gineta
Rastro en zonas de paso
La mayoría de los mamíferos de nuestras latitudes son nocturnos, pero es fácil identificar sus lugares de paso por los mechones de pelo que quedan prendidos en las alambradas. También es frecuente que muchas especies se muevan habitualmente por sendas que ellos mismos crean. Estos lugares de paso se pueden ver con facilidad en los setos del borde de los caminos humanos. Son como agujeros en la maleza. Además las marcas de rascado, mordeduras o cuernos en la corteza de los árboles pueden ser señales de ciervos o jabalíes.
Los jabalíes afilan sus colmillos contra los troncos de los árboles
También podemos detectar su presencia por las heces. Algunas son muy fáciles de diferenciar. Las deposiciones de conejo tienen forma de canica y las dejan amontonadas en “letrinas”. Las de jabalí son muy parecidas a las de los cerdos. Las de los carnívoros que han ingerido huesos suelen ser de color blanco.
Letrina de conejo al borde de un camino en la isla de Ons
Aprender a identificar rastros y huellas en la naturaleza no solo es una habilidad útil, sino también una forma de profundizar en la conexión con el entorno. Cada pista cuenta una historia sobre los animales que nos rodean. Con práctica y observación, podrás interpretar estos signos y entender mejor el comportamiento de la fauna local.